Revistas de punto en España

No hace falta ser una obsesionada del punto para saber que en España escasean y mucho las revistas y publicaciones dedicadas a esta nuestra afición. Normalmente ir al kiosko a por la búsqueda y captura de algo así suele convertirse en misión imposible y derivar en mucha frustración. Es habitual ver las típicas revistillas tipo “Labores del hogar”, que no es que desmerezcan nada, sino que simplemente suelen tener cosas bastante clásicas y de toda la vida. La revista “Katia” lleva ya muchos números y es muy fácil de encontrar, pero personalmente me plantean pocos retos y además, no sé que pasa últimamente, pero hay muchas cosas relacionadas con sus lanas tipo “fantasía” con pelos, brillantes y bolas, que son muy especiales pero no son del gusto de todo el mundo. Y lo mismo pasa con las otras revistas exclusivas de marcas de lana.

En España, pues, nos toca ponernos verdes de envidia al ver toda la variedad de revistas y libros que pueden conseguirse en otros países (en especial en EEUU) y que solamente podemos conseguir vía online y dejándonos medio sueldo en los portes. Por consiguiente nos toca jodernos y/o tirar de patrones gratuitos en red y/o optar por vías poco lícitas.

Pero eso no me satisface. Sé que es poco ecológico, pero a mí realmente me gusta hojear las revistas físicamente, notar el tacto del papel, pasar las páginas y hacer ese tipo de cosas, por eso sigo comprando aunque sé que seguramente no me va a gustar lo que hay dentro.

Sin embargo hoy quiero romper una lanza a favor a una revista en castellano que creo que merece bastante la pena y que no es demasiado conocida. Se trata de “Sandra, tendencias de punto” (no confundir con “Sandra, moda punto”), y actualmente se puede encontrar ya su número 6, de cara a este otoño e invierno. Normalmente suele haber más de 70 patrones por publicación y, como siempre, hay algunos diseños que no te pondrías jamás, otros que no te llaman especialmente y otros que encuentras preciosos. Lo importante es que se nota que, para bien o para mal, están bastante bien trabajados y “currados”: hay trenzas, calados, punto bobo… un poco de todo. Además, no trabajan para ninguna marca de lanas en concreto, así que hay mucha variedad de estilo.

Estas son las portadas de sus tres últimos números, que es lo máximo que he podido encontrar trasteando por la red.




Si sois como yo y os gusta chafardear físicamente las revistas de punto, ésta es la que yo os recomiendo. Estoy segura de que habrá más de un patrón en cada número que os interesará. De momento no podemos disfrutar de las maravillas de patrones y artículos de las publicaciones americanas, pero creo que ésta merece la pena.

Como anécdota para finalizar esta entrada os contaré que el pasado mes de febrero me hice con el número de invierno de la revista Knit It. Lo encontré en un humilde kiosko de mi barrio, me costó algo caro pero ahora lo guardo como oro en paño. No sé cómo llegó hasta aquí, pero ya no he vuelto a ver nada más. Una pena.