Yo también he tejido el Citron...

... ¡y ahora es mi nuevo chal favorito!

Si me lo dicen hace un año y medio me hubiera partido de la risa.

Cuando se publicó el patrón, en diciembre de 2009, no me gustó en absoluto. En las fotos aparece una chica rubia (la diseñadora), monísima toda ella, con un fino vestido negro con escote palabra de honor, unos pendientes de oro y brillantes y un collar de perlas, luciendo su delicado Citron hecho con Malabrigo Lace en color verde, todo perfectamente combinado, todo muy elegante y bien acertado. No me pareció, para nada, que ése fuera un chal acorde con mi estilo y mis gustos, no me atrajo lo más mínimo.

Sin embargo tuvo un éxito abrumador. Muchas personas tejieron su Citron y todas parecían estar encantadas a pesar de que la mayoría están de acuerdo en que es un poco tedioso de tejer. Poco a poco fui viendo distintas versiones del chal, vi Citron de colores, Citron más grandes, Citron con lanas hiladas a mano, Citron lucidos informalmente con vaqueros y camisetas... y finalmente, un año y poco después, terminé poniéndomelo en la cola de mis cosas para tejer.

Tenía muy claro, eso sí, que no quería que el mío fuera como el original, tenía que ser de colores y muy rústico, así que las opciones de lanas a utilizar se reducían a dos: Noro Kureyon sock o una lana hilada por mí. A punto estuve de utilizar esta, pero finalmente acabé decantándome por la primera opción y, cómo decirlo, ¡fue una decisión muy acertada!

Lo tejí exclusivamente durante mis vacaciones de agosto, en las que estuve viajando por Andalucía. Los puntos los monté en el viaje de ida y los cerré en el de vuelta.

Lo cierto es que no se me ha hecho nada pesado de tejer, lo iba cogiendo en mis ratos libres e iba haciendo poco a poco. Eso sí, tampoco quise hacerlo más grande que el original, de lo contrario creo que sí que me hubiera cansado mucho.

Utilicé exactamente una madeja de Kureyon Sock, pero tuve que hacer una vuelta de menos al final para no quedarme sin material. Los puntos están cerrados con otra lana de color similar a uno de los de la madeja de Noro. Se nota la diferencia, pero no queda mal.

¡Estoy segura de que me lo voy a poner muchísimo!

Detallitos...